sábado, 22 de septiembre de 2018



Tu beso marco en mi pecho un "te quiero".
Sobreviví a el día, amando a la noche.
Me entregue a la vida, queriendo tu espera.

Tu beso marchito a el ocaso, queriendo a el amanecer.

El mar oculto su tempestad de caparazón.
llego a mí la espuma, de desear tu beso:
de una espera, de un quizás, de tal vez, tal vez.

Sobreviví a la derrota, aceptando la inecesaria victoria.

Tu beso despertó mi ser.
Con un "te quiero".
Con una espera, de querer.

La tristeza se marchó al bosque de la memoria, perdiendose.
La alegría llegó envuelta de apasionante melodía, queriendote.

Con un "te quiero", querer;
tu beso marco mi historia.
Para sobrevivir a el día, 
Para aceptar la inecesaria victoria. 

No es un invento de látidos, no es un sueño de utopía.

Marcaste mi vida,
por el beso que no te atreves a dar,
por el hecho de ser yo hombre y tú mujer:
Dos perfectos desconocidos.
Que no se atreven el permiso de querer...


Por:
David De Bergerac 
Un 22 de septiembre del 2021 / 2:10 am – 2:45 am 

Para ti seas quién seas, estés en donde estés.